Esta encantadora casa adosada en Altea, ubicada en la pintoresca zona del Casco Antiguo. Con una superficie de 328 metros cuadrados y a sólo 450 metros de la playa, esta casa rústica ofrece una combinación única de encanto histórico y proximidad al mar.
La propiedad dispone de 7 habitaciones dobles en total, distribuidas en dos viviendas independientes que permiten flexibilidad y privacidad de uso. Esto añade una dimensión extra a la propiedad, haciéndola ideal para quienes buscan espacio adicional para invitados, un estudio o incluso la posibilidad de obtener ingresos adicionales alquilando una de las viviendas.
Además, hay 2 baños y un aseo para invitados, lo que proporciona practicidad para la vida diaria. Aunque la casa necesita una reforma, su potencial es evidente, permitiéndole crear el hogar de sus sueños.. .
La cocina está totalmente equipada y la carpintería interior de madera aporta un toque cálido y acogedor a cada espacio. Orientada al sur, la casa recibe abundante luz natural que realza la belleza del suelo de baldosas. Las ventanas exteriores de aluminio y madera enmarcan vistas encantadoras y añaden un estilo único a su hermosa fachada blanca de estilo mediterráneo.
Un balcón/terraza captura la esencia del pueblo, un loft agrega un toque extra de encanto, una despensa para almacenamiento conveniente y un patio privado, que antiguamente servía como corral y agrega un toque rústico y auténtico.
Los techos altos contribuyen a la sensación de amplitud y luminosidad en toda la propiedad. Una terraza soleada proporciona un espacio perfecto para disfrutar del aire fresco y de las vistas despejadas al mar. Además, estarás cerca de diversos servicios esenciales como autobuses, centros médicos, universidades, colegios, parques, supermercados y la estación de tren. Los alrededores ofrecen un encantador ambiente costero, con la playa a pocos pasos.
En definitiva, esta casa rústica en el Casco Antiguo de Altea combina a la perfección el encanto histórico, el confort moderno y una ubicación envidiable cerca del mar. Las posibilidades de personalización y transformación son infinitas, y esta propiedad espera convertirse en un hogar lleno de vida, recuerdos y versatilidad gracias a su distribución en dos viviendas, su patio y trastero, lo que antiguamente era el corral, evocando la rica historia de la región.