Crea el hogar que siembre has soñado en esta vivienda ideal para cualquier familia que le guste disfrutar de la paz del mar en la intimidad, con la comodidad de una casa de lujo a pie de playa.
La villa está ubicada en primera línea de playa de una bahía que nos regala el Mediterráneo, en el Ensenado del Esparto, conocida también como la bahía de Miami, donde se cobija del viento levante, haciendo del mar mayor un espejo prácticamente todo el año. En la Manga encontramos un paraíso entre dos mares, pero sólo unos pocos tienen el privilegio tener su casa donde 100m separan un mar de otro.
La villa se distribuye en tres alturas, en planta baja encontramos un precioso salón con vistas al Mediterráneo, cocina abierta con vistas al mar menor y un aseo. Los dormitorios se ubican en la planta primera con dos baños completos, vestidor y lavandería. En la ultima planta encontramos otro dormitorio con terraza de 53 m2 y con unas increíbles vistas al mar.
Podrás disfrutar de tu casa de la playa con máximo confort todo el año ya que dispone de suelo radiante, aire acondicionado, ascensor y garaje y piscina independiente.
Cuando te pongas en contacto con nosotros te informaremos de los gastos que no están incluidos en el precio, gastos de compraventa y honorarios de agencia y te ayudaremos para que tu proceso de compra con nosotros se convierta en un
Calma: Estado ideal de tranquilidad que tendrás al comprar tu casa con nosotros.
Por último, te vamos a contar una cosa: Los propietarios han confiado en nosotros y nos han contratado en exclusiva para que les ayudemos a vender uno de sus bienes más preciados, su casa, su hogar. Esto para ti, como comprador, será una garantía ya que tendrás acceso a un servicio de calidad, un trato fácil, sencillo y sin interferencias de terceros. Por eso, te vamos a pedir un favor, habla con nosotros, no los molestes, te vamos a ayudar en caso de interés en todo el proceso y te vamos a facilitar toda la documentación e información que precises. Como ya te habíamos dicho, ¡Un servicio de calidad!.
