Casa en venda a Altea la Vella de 3 habitacions amb terrassa i piscina

Enclavada en el paisaje sereno y pintoresco de Altea la Vella, esta villa mediterránea es un testimonio de elegancia y artesanía atemporales. Con una fusión de encanto tradicional y comodidades modernas, esta residencia ofrece una experiencia de vida incomparable. Situada en una generosa parcela de 1300 metros cuadrados, esta villa irradia una sensación de grandeza y tranquilidad. Al entrar en la propiedad, los jardines bien cuidados lo saludan, creando un ambiente sereno que invita a la relajación y el rejuvenecimiento.   Al entrar, la villa le da la bienvenida con amplios interiores. Un punto focal de la sala de estar es una majestuosa chimenea, perfecta para pasar agradables veladas relajándose con sus seres queridos. La villa cuenta con tres lujosas habitaciones, cada una de las cuales ofrece un refugio sereno para el descanso y la relajación. Cuatro baños elegantemente decorados garantizan la máxima comodidad y conveniencia tanto para los residentes como para los huéspedes. Salga a la terraza, donde las vistas al mar se despliegan ante usted. Ya sea descansando en el patio bañado por el sol o disfrutando de una cena al aire libre con el telón de fondo de impresionantes puestas de sol, la terraza ofrece el escenario perfecto para abrazar el estilo de vida mediterráneo. Las comodidades adicionales incluyen una piscina privada, donde los residentes pueden darse un refrescante chapuzón en los cálidos días de verano, y un garaje que ofrece estacionamiento seguro para vehículos. Construida en 1998, esta villa muestra una arquitectura atemporal y una meticulosa atención al detalle en sus 412 metros cuadrados de espacio habitable. Su distribución de una sola planta garantiza una accesibilidad y comodidad sin esfuerzo para los residentes de todas las edades. Con su ubicación idílica, lujosas comodidades e impresionantes vistas al mar, esta villa mediterránea ofrece una oportunidad incomparable de experimentar el epítome de la vida costera en Altea la Vella. Ya sea como residencia permanente o retiro de vacaciones, esta exquisita propiedad es un testimonio de la vida refinada en su máxima expresión.