Pis en venda a La Seu - Cort - Monti-sión de 4 habitacions amb terrassa i balcó

Bienvenido a este encantador ático dúplex ubicado en el casco antiguo de Palma, donde la historia y la modernidad se encuentran en un entorno sereno y privado. Este excepcional ático dúplex está situado en el corazón del casco antiguo de Palma, ofreciendo no solo comodidad sino un estilo de vida codiciado. Está ubicado entre las encantadoras calles de Sant Nicolau, Paseo del Borne y Las Ramblas, y a tiro de piedra de la Avenida Jaime III. La residencia promete una puerta de entrada exclusiva a las mejores tiendas, restaurantes y lugares de interés histórico que Palma tiene para ofrecer, como Casal Solleric y Gran Hotel. La vivienda tiene 182 metros cuadrados y está diseñada en dos plantas meticulosamente diseñadas. Esta residencia combina a la perfección el encanto tradicional mallorquín con las comodidades modernas. La planta baja le da la bienvenida con un amplio comedor y una cocina totalmente equipada que conserva su encanto original, complementada con tres habitaciones bien equipadas con amplio espacio de almacenamiento y un baño en suite. Todas las habitaciones están bañadas por luz natural desde grandes ventanales y balcones. Las vigas a la vista y los techos altos en todas partes añaden un toque de elegancia y una sensación de amplitud. El nivel superior presenta una generosa sala de estar con una acogedora chimenea, donde le esperan el ocio y la relajación. La sala de estar conduce a una magnífica terraza de 43 metros cuadrados, perfecta para entretener a los invitados con una barbacoa o disfrutar de momentos serenos bajo el cielo mallorquín. Aquí, disfrute de impresionantes vistas de la Iglesia de Sant Nicolau y el horizonte del casco antiguo. Un dormitorio adicional con un espacioso baño en suite completa esta planta, ofreciendo privacidad y confort. Esta propiedad única también cuenta con la comodidad de una plaza de aparcamiento, un trastero considerable y calefacción de gas ciudad, lo que mejora la experiencia de vida. El edificio en sí ha sido cuidadosamente rehabilitado, preservando la esencia de la arquitectura histórica de Palma al tiempo que ofrece comodidades modernas. Estas comodidades incluyen un ascensor y una gran entrada de madera que evoca la sofisticación de una época pasada.